Hay veces en que uno se equivoca, esta es la mía. -Siempre es la mía-
Yo y mi raciocinio no nos caemos bien, él me juega malas pasadas y le gusta que me equivoque, lo goza. Yo por otro lado lo anhelo, lo quiero y necesito su compañía. Esa es mi historia de siempre, en todo y con todos.
Hace tiempo no me sentía así, como una cuncuna rechazada que nunca se convertirá en mariposa; Pero yo me lo busqué, yo con mi pseudo raciocinio que me repele.
¿Karma? es más que probable que sí y por eso lo tomo con calma y hasta semi agradecida, ya que tal vez -en volá, más shoriflay- dentro de todo lo incomodo, esta es otra lección que debo aprender y siento -extrañamente con positivismo- que sólo así uno se torna una persona más madura, más fuerte tal vez y más apta para vivir en este planeta en decadencia. Ahora la pregunta es: ¿Por qué a alguien se le ocurriría que yo quiero vivir en este planeta?, no tengo idea y si lo pienso más, más negra se pone mi mente. Así que hasta ahí nomás llegará mi duda. Omitir.
No me gustaría que alguien leyera esto que escribo, pero me gustaría que alguien llegara de algún lado y me dijera lo que pasa en la mente de los demás y así tal vez yo podría actuar acorde al mundo en el que estamos. No tendría que recibir reclamos de terceros, ni yo sentirme reprimida por algo/alguien inexistente pero que en realidad es en exceso tangible -Para mi por lo menos-.
¿La forma en que soy es universal?, ¿Lo que yo quiero hacer lo puedo hacer?, ¿No molesta?. Oye, advierto que tengo cientos de impulsos al día y no creo que sea correcto realizarlos.
Pero es otro tema el que me estresa, es eso. Aquello.
O mi mente está en exceso enferma o simplemente la vida es así de extraña.
Yo espero y esperaré el día en el que los sentimientos se dupliquen y la efusividad invada su territorio sin barreras. Yo sé que llegará el momento en el que no pueda alejarse de mí y que me dirá lo bien que se siente.
Yo lo sé y si la lección de toda esta webá es ser más positiva, creo que estoy aprendiendo.